No sabrÚ lo que busco hasta que lo encuentre pero sÚ lo que no quiero. Desconozco sißvan a saber quererme como espero pero puedo discernirel amor de la indiferencia yßsÚ cuidarme de la forma en la quecuidarÝa de otra. Ya no necesito a nadie pero estoyßpreparada parahablar de intimidad, algo de paz y de ternura. Y mientras esperonoßespero realmente y cuando la deseo es sin necesidad de nada. No voy a volver aßceder ante el desapego. No hay desgana en el cari±o niesquivez en el afecto yßdejarse querer es mßs fßcil pero abre unvacÝo.
A mÝ, cuando me encuentran, ya no tienen que buscarme.